Todos los cementerios del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, que han sido construidos con dineros de las municipalidades y se encuentran en la actualidad bajo su dirección administrativa y sostenimiento financiero, son declarados libres para la inhumación y exhumación de restos mortales humanos, sin cortapisas religiosas, y sujetándose únicamente a los preceptos de la higiene pública, y del registro civil; Disponiéndose, que no se prohíben ceremonias de ningún culto en dichos cementerios.